Tras recorrer los más diversos países del mundo, Después del mar II, la serie documental de TPA centrada en la emigración asturiana por el mundo, emite este miércoles el penúltimo de los trece capítulos, dedicado a España.
Mahón (Menorca), Castellón de la Plana (Castellón) y Alcobendas (Madrid), son los tres escenarios en que se desarrollan las historias de estos asturianos que viven fuera de su tierra.
Sonia, cocinera del Club Náutico San Carlos, llegó a Menorca junto a su marido, que ha fallecido recientemente. Ella recuerda emocionada los más de treinta años que juntos vivieron en la isla. A Nati Quirós fue su profesión, la medicina, la que la llevó de Sama a Mahón. Allí formó una familia, con la que viaja frecuentemente a Asturias. Pedro González, de Belmonte de Miranda, ha encontrado en este hermoso rincón balear el lugar en el que plantearse su futuro.
Neto llegó a Alcobendas hace catorce años para dar una clase de gaita Y allí sigue. Actualmente dirige una banda de más de treinta intérpretes de ese instrumento. En esa misma localidad madrileña, Justina García lleva viviendo cuarenta y dos años, pero no se olvida de Su lugar de origen: Llanes.
Javier, capitán de la Marina Mercante, decidió un día desembarcar y pisar tierra firme. Los pasos le llevaron a Castellón de la Plana. Ahora trabaja en el puerto de esa ciudad y vive allí con su mujer, Pilar, y su hija. Después de emigrar a Suiza, Marisol y Daniel también recalaron en Castellón. Hoy, ya jubilados, pasan una buena parte del año en Asturias.
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